El tema no es para distraídos sino para aquellas personas que ofician de habitantes de Argentina. Nuestro país maltratado reiteradamente a partir de la especulación económica y la destrucción de la estructura virtuosa empujando a los artífices del esfuerzo hacia una crisis creciente. Casi dos años de neoliberalismo maquillado de eso que llaman libertario, hasta ahora más despóticos e intervencionista que lo que supone el calificativo.
Recordemos los contenidos de la llamada ley Bases generadora de esas adecuaciones que sacaron sangre de la piel de la institucionalidad, mediando el abuso de autoridad inaceptable.
Pero no termina allí el proceso, porque tal lo reitera Milei, su idea o la de sus financistas, es redoblar el paso hacia una crisis mayor, con más ajuste y tal se vio con Trump, más entrega de la soberanía y la economía dirigida desde el Tesoro de los EEUU.
Las mencionadas reformas previsional y laboral son el indicio de cuál es la finalidad para profundizar todos los ajustes; que quedaron pendientes de los mandatos del Sturzenegger que lleva en su prontuario los gravísimos antecedentes de los negociados contra la Nación.
Especialmente en 2001 cuando ocupara el cargo de secretario de Política Económica y concretara el traumático mega canje que motivara su procesamiento por delito económico; mágicamente liberado de culpa y cargo a pesar de la enorme gravedad y el daño causado a la mentada pero maltratada Patria.
Una vez más prometen avalanchas de inversiones pero deben adecuarse las condiciones. Requerimiento reiterado que nunca dejó un saldo equivalente al sacrificio. Por el contrario, aumentó ganancias empresarias foráneas cuyos capitales fueron a la timba histórica, reeditada por Milei/Caputo en este tiempo.
Viene la segunda versión de la ley Bases rematando la pretendida reforma laboral, y sosteniendo la retención de las partidas que deben adjudicarle a cada una de las leyes ratificadas por el Congreso Nacional, por el que debe recordarse que es una de las partes del gobierno y no otro esclavo del presidente.
Los señores legisladores deben prepararse para recibir la andanada de más de 420 artículos antes desestimados, tal vez por imprudentes, abusivos o anti constitucionales. A las insistencias anómalas habrá que responderle de igual modo y frenar la destrucción absoluta del Estado y todo lo que de él depende.
La decisión la comunicó el ladero de Sturzenegger, Alejandro Cacace, confirmando que vuelven por lo que pudieron imponer en la primera versión del conjunto anti constitucional paradójicamente legislado.
Relativo a este tramo es importante que los legisladores aborden el Decreto de Necesidad y Urgencia N°70/2023, para aplicar el formal rechazo a la herramienta nefasta que maneja la abusiva omnipotencia demostrada desde el poder Ejecutivo.
Vuelven con el sello del “Pacto de Mayo” por el que Cacace anticipó que “Hay un decálogo de puntos en los que se está trabajando: la inviolabilidad de la propiedad privada; el equilibrio fiscal innegociable; la reducción del gasto público hasta llegar al 25 por ciento del PBI; una educación inicial, primaria y secundaria moderna; la reforma tributaria; la rediscusión de la coparticipación; la explotación de los recursos naturales; una reforma laboral moderna; una reforma previsional; y la apertura del comercio internacional”.
Temas que ocultan los intereses rechazados anteriormente y que sin duda, son muy sensibles a las maltratadas economías provinciales a las que no parece que quieran mejorar y en todo caso, negociar más ajuste a cambio de algunas concesiones menores.
Así buscan acumular mayores recursos a cambio de algunas concesiones menores para lograr el apoyo a otros contenidos gravitantes para la ya malograda economía.
Ahora quieren dialogar simulando ser participativos pero por ejemplo, rechazan las leyes ratificadas soslayando al Congreso Nacional y eso, es la muestra del grado del falso dialoguismo para distraer y ganar tiempo mientras compran voluntades.
En todo caso hay que ver el resultado de las elecciones del domingo 26 de octubre, y luego posicionarse para el proceso legislativo reordenador de los atropellos que ya no se soportan más. Son las medidas que reiteraron también desde la Casa Blanca reiterando lo antedicho desde el FMI.
No hay que permitirle el espacio para que califiquen al parlamento de “golpista”, porque el que atenta contra la libertad y el Derecho es el presidente de la Nación con sus declaraciones, acciones, amenazas y atropellos indisimulados.
Finalmente no hay que dejarse llevar por los discursos en los que aseguran esa falsedad innegable, sobre que le han devuelto dinero al pueblo con el cierre de instituciones. No es ahorro ni devolución de ningún dinero sino destrucción del Estado y derivación de ese dinero a un proceso misterioso que al menos debieron disponer para aumentar reservas en lugar de correr a pedirle ayuda a Trump con lo peligroso que ello significa.
Hablan de un ahorro hipotético de $18 mil millones cuyo destino deben conocer muy pocos. Atención que los pesos que le sacaron al pueblo se lo están llevando desde el Tesoro de los EEUU, adquiriendo un arma peligrosísima para el momento de recuperación de los dólares prestados a un costo incalculable.