Mientras que desde las Bolsas de Comercio y de Cereales de Rosario y Buenos Aires respectivamente; no auguran (como de costumbre) importantes resultados de las próximas cosechas, el gobierno nacional anunció las nuevas medidas para el sector del agro.
En este sentido confirmaron la vigencia de las retenciones reducidas para la cebada y el trigo, mientras que se reimplantan las alícuotas más altas a la soja y al maíz, entre otros productos. De este modo se pone fin a la rebaja temporal de los derechos de exportación, de manera contraria a lo que esperaban los empresarios del sector.
La medida rige hasta el 31 de marzo de 2026 con alcance a las alícuotas del 9,5% que gravan al Trigo y a la Cebada. En el caso de la Soja el cargo pasa del 26 al 33%, para el Maíz y el Sorgo, entre otros granos, el aumento va del 9,5 al 12%, mientras que para el Girasol incrementará del 5,5 al 7%. Valores incluidos en el Decreto N° 439/25 con vigencia desde el martes 1° de julio de 2025.
Variantes que motivaron el reclamo de productores y gobernadores relacionados con los rubros referidos. Desde las provincias reclaman la suspensión de la medida mientras que ahora el gobierno nacional se queja por el déficit que lo acorrala tras lo errático de las políticas económicas.
En este aspecto se conoció el mensaje de Ignacio Kovarsky, en su carácter de presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP), asegurando que las retenciones en cuestión; “son y serán un robo con cualquier gobierno”. El dirigente empresarial aseguró que Milei no ha cumplido con sus promesas eliminatorias de los derechos de exportación al campo.
Desde el gobierno nacional reiteraron que “Nada nos va a sacar del equilibrio fiscal”. Una visión que no tiene el respaldo de los números reales de una economía desequilibrada por el endeudamiento y la mala administración de divisas con aliento a los capitales especulativos.
